Identidad
La identidad incluye la integración de los aspectos físicos, cognitivos, emocionales, relacionales, sexuales y trascendentes del “yo”.
La identidad puede verse amenazada por padecer enfermedades físicas, alteraciones psicológicas, problemas de relación (por ejemplo, dependencia emocional), falta de clarificación o aceptación de identidad sexual, e incluso búsqueda del sentido de la propia vida. La identidad se resume en la pregunta filosófica ¿Quién soy? Ya planteada desde los principios de la humanidad.
La hipnosis puede ayudar a esta integración usando metáforas que la promuevan, fortaleciendo las cualidades conocidas, aceptando también las propias limitaciones, considerándose como “una piedra preciosa que refleja la luz mediante todas sus facetas” o un puzzle que, cuando se encaja, forma una totalidad.
Se puede usar como metáfora una casa, descubriendo en cada habitación aspectos propios que nos hacen formar una unidad compleja y armoniosa. También se puede realzar la vitalidad, mediante sugestiones de fuerza y reviviendo sensaciones de momentos muy especiales de la propia vida.
Hay muchas maneras de abordar lo que somos, siempre dejando espacio para la evolución, crecimiento personal y maduración que nos va dando la propia existencia.